Lección 090 – Psicología y aspectos prácticos para cambiar de estilo de vida

UNIDAD 90: ASPECTOS PSICOLÓGICOS Y PRÁCTICOS INVOLUCRADOS EN UN CAMBIO DE ESTILO DE VIDA.
TEMA: Cuando una persona realmente quiere cambiar, cambiará su estilo de vida.
INSTRUCTOR: Margaret Flynn

·        Razonamiento

·        Objetivos de la unidad

·        Definiciones

·        Conceptos claves

·        Puntos principales

·        Índice

·        Introducción

·        Preguntas sobre la unidad

·        Resumen

·        Textos suplementarios

·        Ejercicios

·        Respuestas a los ejercicios

RAZONAMIENTO

La psicología de los seres oscila entre simple y lógica a compleja e irracional. Personas con una multitud de personalidades individuales viven juntas para formar una conciencia colectiva.

La mayoría de estas personas pasa por la vida aferrada a la imagen que tiene de sí misma, a la imagen que los demás tienen de ella, a sus posesiones y hogares, a sus hábitos, tradiciones, comida, opiniones, deseos; aferrada a casi todo en su vida. En realidad, sobre todo se aferran a su vida. Sus cuerpos son recipientes de su fuerza vital: el propio poder del universo manifestado en cada ser vivo del planeta.

Sin embargo, y a pesar de que su instinto principal es sobrevivir, con frecuencia vemos cómo la gente actúa de forma contraria a su deseo de vivir.

Con conocimiento o sin él, la gente practica hábitos autodestructivos que minan la salud y acortan la vida.

¿Qué es esta extraña criatura, tan capaz de ser inteligente, sabia y buena y que al mismo tiempo debilita o destroza su cuerpo o destruye su propio entorno y fuente de vida contaminándolo? Echaremos un vistazo dentro de esta criatura, el ser humano, y veremos qué lo hace actuar.

OBJETIVOS DE LA UNIDAD

Esperamos que te animes a investigar la psicología, los hábitos, la fuerza de voluntad, la filosofía, intuición y estados de conciencia, el vínculo entre dieta y mente/espíritu y, después, la relación entre estas facetas del ser y el hecho de intentar un cambio en el estilo de vida.

El estudiante debe aprender que el verdadero significado de libertad es «estar libre de necesidades» y que es fácil seguir el camino de esta verdad una vez hemos tomado la decisión de cambiar. Esto conlleva conseguir el mejor estado del ser y mucha paz interna. Estas formas de vida tan elevadas pueden conseguir que logremos la paz en la tierra; de hecho, la evolución y supervivencia de todas las especies del planeta requieren que la humanidad viva en paz.

DEFINICIONES

CONSCIENTE: Que siente, percibe o nota con un grado de pensamiento u observación controlado; capaz de pensamiento, voluntad o percepción; que no tiene las facultades mentales inactivas a causa del sueño, desfallecimiento o estupor; despierto; hacer o actuar con conocimiento crítico.

CONCIENCIA: La cualidad o estado de conocimiento, sobre todo de algo en el interior de uno mismo; el estado o hecho de ser consciente de un objeto externo, estado o hecho; la totalidad de los estados conscientes de un individuo.

EGO: La división de la psique, en la teoría psicoanalítica, que sirve como mediador consciente entre la persona y la realidad, especialmente al funcionar tanto en la percepción de la realidad como en la adaptación a la misma.

EGOCÉNTRICO: Preocupado por el individuo más que por la sociedad.

AUTODEFENSA: Un mecanismo psicológico creado para proteger (consciente o inconscientemente) la propia imagen o autoestima de la persona.

EGOTISMO: Sentido exagerado de la importancia de uno mismo; vanidad.

ELLO: La división de la psique, en la teoría del psicoanálisis, que es completamente subconsciente y que es la fuente de la energía psíquica derivada de las necesidades instintivas e instintos.

MANDATO: Orden formal o autorización confiada a alguien.

PERSONALIDAD: El complejo de características que distingue a un individuo; la totalidad de las tendencias conductuales y emocionales; los rasgos del carácter, actitudes o hábitos.

PSICO—. Elem. compos. que significa alma, espíritu; procesos y actividades mentales.

PSIQUE: Alma humana, uno mismo, mente.

PSIQUIATRÍA: Rama de la medicina que trata con trastornos mentales, emocionales o conductuales.

PSÍQUÍCO: Relativo a la psique; fuera del campo de la ciencia o conocimiento físico; inmaterial, moral o espiritual en origen o fuerza; sensible ante fuerzas o influencias no físicas o sobrenaturales; marcado con una sensibilidad, percepción o comprensión extraordinarias  o misteriosas.

INSENSIBILIDAD PSICOLÓGICA: Una clase de anestesia mental; insensibilidad (consciente o inconsciente) de emociones o reacciones cuando es demasiado difícil enfrentarse a la verdad. Esto puede que proteja la sensibilidad de la persona, pero no puede eliminar el problema original.

PSICOLOGÍA: la ciencia de la mente y la conducta.

SUBCONSCIENTE: Las actividades mentales que se desarrollan bajo el umbral de la conciencia.

SUPERYÓ: La división de la psique, en la teoría del psicoanálisis, que representa la interiorización de la consciencia parental y de las reglas de la sociedad, y funciona para recompensar y castigar a través de un sistema de actitudes morales, conciencia y con un sentido de culpa.

CONCEPTOS CLAVES

1) El cuerpo, mente y espíritu están interrelacionados: la salud es tridimensional.

2) La verdadera libertad es verse libre de necesidades.

3) Cuanto más cargas te quites más libre eres.

4) La gente debería aprender a vivir en el presente y a desligarse más de sus necesidades.

5) Todos estamos conectados a una conciencia colectiva.

6) El vegetarianismo y una dieta de alimentos crudos fomentan la paz mental y la paz de la humanidad.

PUNTOS PRINCIPALES

1) Muchas personas ya están destrozadas en la flor de su vida.

2) Con frecuencia, muchas personas sustituyen el amor y cariño que realmente desean por comida y otros desenfrenos.

3) Los buenos hábitos en el estilo de vida se fortalecerán conforme vayan sustituyendo a los malos hábitos.

4) La gente debe querer cambiar para poder cambiar para mejor su estilo de vida.

5) La ley de efectos duales afirma que toda estimulación es seguida por una cantidad proporcional de depresión, y viceversa.

6) Menos es mejor. Los estudios con ratones demuestran que, con las demás condiciones iguales, a los ratones que se les alimenta la mitad menos (con la misma comida) viven bastante más tiempo.

ÍNDICE

I.      INTRODUCCIÓN

II.   LA PSICOLOGÍA DE REALIZAR UN CAMBIO DE VIDA.

A. La psicología del ser

1. Nutrición y salud mental.

2. Somos lo que comemos, digerimos y asimilamos.

3. Somos lo que pensamos.

B. Conciencia colectiva: el pensamiento universal.

C. Los pensamientos conscientes y subconscientes.

D. Emociones: liberar toxinas emocionales y mentales.

III. ASPECTOS PRÁCTICOS PARA REALIZAR UN CAMBIO DEL ESTILO DE VIDA.— PRIMERA PARTE.

A. Ser honestos con nosotros mismos.

B. Hábitos: romper la cadena.

C. El amor es una necesidad humana básica.

IV.   ASPECTOS PRÁCTICOS PARA REALIZAR UN CAMBIO DEL ESTILO DE VIDA.— SEGUNDA PARTE.

A. Ver la verdad.

B. Vivir con la verdad.

C. Imaginar lo positivo.

D. Ingerir una dieta óptima y vivir según tu mandato natural.

E. Recodar las simples alegrías de la vida.

F. Darse uno mismo.

G. Relax

H. Tómate tu tiempo.

V.      UTILIZAR LA PSICOLOGÍA CON OTROS.

A. Cosas que se pueden hacer y que no se pueden hacer.

B. «¿Soy el guardián de mi hermano?

ASPECTOS PRÁCTICOS Y PSICOLÓGICOS INVOLUCRADOS AL REALIZAR UN CAMBIO EN EL ESTILO DE VIDA. De Margaret Flynn

I. INTRODUCCIÓN

Antes de que en esta unidad exploremos la psicología mental, por favor, repasa la Unidad 16 «Nutrición, Mente y Emociones» y refresca tu memoria con «mente sana en cuerpo sano».

Otras unidades que te aconsejamos que repases son:

21: Síntomas que ocurren durante la transición del estilo de vida.

38: Beneficios sociológicos y ramificaciones económicas al evitar la comida basura.

63: El Régimen Extenso de Desintoxicación McCarter.

69: Enfoque nutricional para superar las adicciones.

II. LA PSICOLOGÍA DE REALIZAR UN CAMBIO EN EL ESTILO DE VIDA.

A.  La psicología del ser

1. Nutrición y salud mental.

Por regla general, cuando pensamos en la palabra «psicología» vemos un sofá y un especialista que cobra enormes tarifas por hablarte sobre tu vida. De alguna forma, los indios de Méjico y los pescadores de las pequeñas islas de Grecia, que todos luchan como nosotros para sobrevivir al día a día, se las han arreglado para vivir sin estos consejeros. Con nuestra prisa por llegar a la era espacial hemos vuelto a olvidar la sabiduría de la simplicidad. La intuición y el sentido común nos ayudan a entender mejor los dominios de la mente, al igual que nos dicen cómo cuidar nuestros cuerpos. Es este sentido común el que nos dice que no confiemos nuestras mentes a un profesional que utiliza toda clase de para tratar a los pacientes (desde excitantes a tranquilizantes —con todos sus efectos secundarios negativos— a tratamientos de shock). Estos expertos rara vez tienen en cuenta la relación obvia entre nutrición y salud mental y buscan causas más esotéricas para explicar el estado mental de la persona, todas ellas apropiadamente etiquetadas con términos psicológicos que suenan muy intelectuales y con los que intentan crear un aura de misterio. Términos como «educación parental», «presión del grupo de iguales», etc., todos los cuales tienen su lugar, pero ninguno de ellos es tan básico ni abarca tanto como la dieta y régimen diarios de una persona.

Con frecuencia, las mismas personas que corren al médico para preguntarle qué es lo que está pasando con su cuerpo son las que corren al psicoanalista para preguntarle qué ocurre con su mente. Parece que estas personas no confían mucho en sus propias facultades. Nosotros hemos comprobado una y otra vez en nuestros estudios de Higiene Natural que nuestros organismos tienen unos increíbles poderes de autocuración, si se le proporcionan las condiciones adecuadas para que activarlos. Ocurre lo mismo con la mente. La gente aprende a determinar su vida solucionando cada problema según va surgiendo, así que la gente de la calle seguramente sabe tanto sobre la vida real —si no más—que los psiquiatras/psicólogos con todos sus títulos universitarios. Si alguna vez nos sentimos desorientados, lo mejor que podemos hacer es mirar dentro de nosotros mismos, descubrir la razón y ver qué podemos hacer para cambiar. En algunos casos, la mejor ayuda que podemos encontrar es contarlo, sacarlo fuera. Podemos hablar con amigos o consejeros que no receten fármacos.

2. Somos lo que comemos, digerimos, asimilamos; y pensamos.

Por el momento, dejaremos los libros de psicología en la estantería e iremos directos al grano: nosotros somos lo que digerimos y asimilados de aquello que comemos, y somos lo que pensamos (nuestros pensamientos determinan nuestras acciones y nuestras vidas) y estos procesos están totalmente interrelacionados. La salud es tridimensional: física, mental y espiritual.

En palabras del poeta y filósofo Jalil Gibran:

»Y dime, pueblo de Orfalese, ¿qué tenéis en estas casas? Y ¿qué es eso que guardáis con las puertas cerradas?

»¿Tenéis paz?

»O ¿sólo tenéis alivio, y la codicia por el alivio, que entra en la casa como invitado y después se convierte en dueño? Ay, y se transforma en un domador que convierte en marionetas vuestros mayores deseos.

»Y aunque sus manos son de seda, su corazón es de hierro. Te calma hasta dejarte dormido. Ciertamente, la codicia por el alivio mata la pasión del alma y después va con su sonrisa burlona al funeral. »

B.  Conciencia colectiva: el pensamiento universal

Desde la infancia, la mayoría de las personas de esta sociedad se han interesado más o menos por sí mismas. Ahora que han descubierto que deberían conocerse a sí mismas están más decididas que nunca a entender cómo funcionan sus mentes. ¿De dónde vienen todos sus pensamientos? Algunas veces los originan ellas mismas y otras parecen surgir de ningún sitio en particular. Además, existe una mente universal, una conciencia colectiva de la que todos nosotros formamos parte. En una era en la que la gente cada vez va adquiriendo más conciencia de sí misma, se dan cuenta de que no están por completo separados de otros seres humanos: todos somos interdependientes y formamos parte de un enorme acuario o microcosmos en el cielo: nuestro planeta Tierra. Lo que somos e incluso lo que pensamos dejará su huella en algún lugar. Incluso si a veces nos sentimos solos, en realidad nunca estamos solos.

Al igual que los niños, los adultos también solemos asociar la comida con el placer/satisfacción (Unidad 16). Si alguna vez sentimos una punzada de ansiedad, ya surja de esta soledad o por aburrimiento en general, tendemos a pensar en la comida para conseguir alguna clase de alivio. Si sólo pudiésemos llenar las partes inseguras, turbias y vacías de nuestra existencia con algo. Nuestra meta es descubrir qué hacer con esta energía. Nosotros creamos nuestra realidad, pero al igual que preferimos culpar a algún germen misterioso de nuestras enfermedades antes que admitir que nuestro estilo de vida genera nuestro estado de salud, preferimos creer que «las cosas simplemente nos pasan por casualidad», sin que podamos controlarlas desde dentro. De esa forma, nos vemos libres de responsabilidad. Nada puede estar más lejos de la realidad.

Nuestras funciones normales, fisiológicas, se producen en el nivel subconsciente, sin la atención consciente de la mente. Nosotros podemos darnos cuenta o no de estos procesos, según nuestra sensibilidad. Nuestros pensamientos conscientes están entrelazados con nuestro subconsciente en una mezcla que determina nuestra existencia. Uno puede asombrarse de que la ciencia-ficción compare nuestras mentes con los ordenadores —en realidad, algunas parecen recolectores de información y centros de almacenamiento que trabajan día y noche—. Quizá aún queden mentes que asemejen ríos, en los que la persona puede convertirse en fluido, relajarse y «dejarse llevar por la corriente»; no obstante, en estos días parece que la compulsión por etiquetar y clasificar es cada vez mayor. Las personas quieren etiquetas para las enfermedades, etiquetas para sus ideas: siempre buscan datos. ¿Cuándo se darán cuenta de que la vida es algo más que retazos? Es un todo. Cada vez que la gente intenta definir algo, ese algo cambiará, como hacen todas las cosas en el planeta, en un instante. Aún así, seguimos insistiendo en definiciones, hechos, etiquetas y datos, y en exteriorizar lo que nos ocurre como algo causado por coincidencias o influencias externas que están más allá de nuestro control. Estamos atrapados por el torbellino de propaganda de nuestros tiempos: ser alguien. ¿Cómo podemos ser alguien y al mismo tiempo no tomarnos a nosotros mismos en serio? Me imagino que tenemos que ver que debemos beber agua, ¡pero sin que nuestros labios toquen el vaso!

A la vida le gusta ponernos en situaciones en las que tengamos que aprender estas lecciones. Cuanto más aprendamos, antes nos sorprenderemos de qué pocas cosas nos suceden por casualidad.

Algunas veces, nos daremos cuenta de que cuanto más duro trabajemos en algo, más progresaremos para conseguir nuestra meta. Otras veces, misteriosamente, parece ocurrir justo lo contrario. Algunas veces, cuanto más queremos algo y más aferrados estamos a nuestro particular deseo, menos éxito tenemos y más nos alejamos de nuestra meta. ¿Cómo puede ser esto? Esto es especialmente difícil de entender  en una sociedad como la nuestra orientada al trabajo y al éxito. A veces, el pensamiento consciente puede interferir en el flujo natural de los acontecimientos. Cuando nos quedamos únicamente con los pensamientos conscientes y no dejamos de parlotear con nosotros mismos puede que nos estemos perdiendo mensajes subconscientes intuitivos que intentan abrirse paso: eso es tan difícil como hablar y escuchar al mismo tiempo.

Pongamos un ejemplo. Una vez me di cuenta de que con frecuencia encontraba algo que había perdido justo en el momento en el que dejaba de buscar, es decir, mi pensamiento consciente se desvinculaba de la búsqueda durante un momento, puede que incluso debido a una distracción momentánea. De alguna forma, en el preciso momento en el que el pensamiento consciente dejaba de funcionar el pensamiento subconsciente se hacía cargo. Yo tenía un presentimiento de que debía buscar debajo de un libro determinado o en un cajón y ¡he aquí el resultado! : ahí estaba el objeto perdido. Me llevó un tiempo darme cuenta de qué principios funcionaban aquí: el pensamiento consciente puede bloquear el subconsciente.

Algunas personas no tienen ni idea de que poseen un pensamiento subconsciente, al igual que otras personas no tienen ni idea de la capacidad innata del organismo para curarse y reparase a sí mismo. Ellos definen toda su existencia por sus pensamientos conscientes. Esto es muy limitado: es igual que intentar definir el océano  por el contenido de unas cuantas de gotas de agua.

Al igual que no podemos ver dos canales de televisión al mismo tiempo, la mayoría de nosotros no podemos sintonizar con nuestro consciente y subconsciente al mismo tiempo. Se puede hacer, de igual forma que cuando hacemos juegos malabares sólo vemos un objeto distante en vez de pelotas, pero al principio se necesita cierto esfuerzo. Por regla general, pasamos la mayor parte, si no todo, de nuestro tiempo de vigilia con el pensamiento consciente, entreteniéndonos con distintas fantasías, planes e ideas, o atormentándonos con preocupaciones y «que hubiera pasado si…», según nuestro estado de ánimo. Con frecuencia, no nos deslizamos en los pensamientos subconscientes hasta que no estamos dormidos.

Pero ¿dónde está exactamente el pensamiento subconsciente? Bueno, la mayoría de nosotros podemos pensar en ejemplos donde hemos sido conscientes de dos clases de conocimientos: podemos saber algo porque nos lo han dicho, porque lo hemos leído en un libro o porque lo hemos visto con nuestros propios ojos; o podemos decir que sabemos algo por intuición. Hay una fina línea divisoria entre estas dos clases de conocimientos, pero la mayoría de nosotros hemos experimentado este sexto sentido. Conforme el ser humano va evolucionando, cada vez  más y más personas descubren que tienen una mayor sensibilidad. Mucha gente lo considera un resurgimiento de la espiritualidad —no necesariamente en el sentido religioso (aunque cuando algunas personas despiertan prefieren definirlo como tal) —. No importa qué nombre le demos, lo que está claro es que el pensamiento de las personas se está expandiendo a una velocidad cada vez mayor para incluir más y más dimensiones. El pensamiento universal también se expande y aumenta en cada momento. Hay miles de libros y palabras para llenar nuestras mentes: nosotros intentamos sacar la verdad. Muchas cosas en el universo permanecen sin explicar. A menudo oímos hablar de fenómenos paranormales o de la capacidad para recibir información procedente del pensamiento universal. Si sentimos la tentación de mostrarnos escépticos, deberíamos preguntarnos si hace mil años la gente no se hubiera reído de alguien que le hablara de vehículos que podían volar por el aire. Antes de la invención del microscopio, nadie podría haber imaginado que había miles de diminutas criaturas vivas moviéndose en un recorte de uña, pero ahí están. Hay personas famosas por creer «sólo lo que pueden ver», pero está claro que muchas cosas existen, ya las vean ellos o no. El pensamiento tiene más potencial del que, en este momento de nuestra evolución, conocemos.

Algunas personas reciben mensajes o información del pensamiento universal cuando están soñando. Yo mismo he soñado docenas de veces con personas (algunas que llevaban meses fuera) y ese día las he visto. Esto me ha pasado las suficientes veces como para al fin darme cuenta de que de algún modo yo sabía en mis sueños y en mi pensamiento subconsciente que las vería —no tenía ninguna idea consciente de que iban a venir—. Muchas personas tienen esa clase de sueños. Algunas personas ven a otra en un sueño y más tarde descubren que ha muerto; algunos han visto incendiarse su casa u otros sucesos que después han ocurrido en la realidad, que estaban ocurriendo en el momento del sueño o antes. La única explicación para estos sucesos es que existe información accesible a aquellas personas que pueden conectar con ella, por aquellos medios que su consciencia considere los mejores, ya sea en un estado de vigilia o de sueño. (Para algunas personas, cuyos pensamientos siempre están muy centrados en el consciente cuando están despiertos, es en el estado de sueño cuando mejor pueden sumergirse en sus pensamientos subconscientes, sin interferencia de la constante presencia de la corriente de pensamientos conscientes.) Los sueños también parecen ser una clase de reordenación de la información y acontecimientos del día, o del pasado, y algunos parecen reflejar (o resolver) nuestros miedos y ansiedades, así que no podemos clasificar todos los sueños en una misma categoría. Hay diferentes etapas de conciencia incluso en el sueño, porque existen varias fases de profundidad en el sueño, así que no todos los sueños son de la clase de «precognición» antes mencionada. Pasado un tiempo, serás capaz de diferenciar entre las distintas clases de sueños y si tienen algún otro significado para ti. No deberías preocuparte innecesariamente con los sueños normales, no más de lo que nos preocuparíamos con cualquier otra parte de nuestro pasado. Sin embargo, deberíamos aprender a reconocer cualquier señal o cualquier otra información que recibamos si sentimos intuitivamente que estamos recibiéndola por alguna razón.

Cuando pienses sobre el conocimiento, ten esto en cuenta. Si miras al océano desde un barco, verás las olas en la superficie, pero ¿cómo imaginarte los millones de peces en el agua y el suelo oceánico que bulle de vida, si nunca has estado ahí abajo ni conoces a nadie que haya estado? ¿Cómo puedes describir el mar, en función de lo que puedes ver? Tu descripción sería una parte de la verdad, pero no toda.

Por eso, cuando hablemos sobre el pensamiento subconsciente, podemos imaginarnos un estanque de agua cristalina, tan clara que puedes ver el fondo del estanque e incluso tu reflejo y el cielo. Cuando el estanque está tranquilo, ves ambas partes, el interior y el exterior, por encima y por debajo de la superficie, en ambas dimensiones. Cuando paras de pensar y la mente se tranquiliza, se vuelve tan clara como el agua cristalina y percibes más de una dimensión, también el subconsciente. Pero si tiras una piedra en el estanque, la superficie se rompe y ambas imágenes, tanto la de arriba como la de abajo, se distorsionan. Tus pensamientos son como las piedras.

Cuando la mente está clara y tranquila, podemos decir que está en un estado de «meditación». Podemos oír la voz interna. Esta es algo diferente de la voz del pensamiento consciente habitual, pero si eres lo suficiente sensible podrás distinguir entre las dos. Por tanto, el conocimiento viene tanto desde dentro como desde fuera, de un lugar que no podemos ver ni medir, pero que sabemos que está ahí. El espacio interior tiene, después de todo, una profundidad tan infinita como la del espacio exterior.

En este ajetreado mundo exterior, no debemos olvidar mirar hacia dentro. Se puede encontrar mucho conocimiento ahí y debemos aprender cómo «dejarlo ir» para abrir los canales mentales. El pensamiento constante bloquea la intuición y agota nuestra energía: la mente necesita descansar igual que el cuerpo necesita descansar.

Cuando pasemos a ingerir una dieta ligera, a base de frutas frescas y crudas, verduras, frutos secos y semillas, advertiremos que se producen cambios en nuestros pensamientos. Puede que nos encontremos pasando por una purgación mental al igual que por una limpieza física. Pronto la mente se estabilizará y se calmará con el nuevo y saludable estilo de vida. Pero siempre que sientas muchos pensamientos dispersos, déjalos pasar, no los reprimas. Al igual que las personas suprimen los síntomas de limpieza con fármacos e interfieren en el proceso natural de curación del organismo, de igual forma también refrenan a veces sus verdaderos sentimientos. El resultado es comparable a lo que ocurre cuando las toxinas se retienen en el organismo, sólo que ahora las toxinas son los pensamientos erróneos, actitudes, prejuicios, etc., : toxinas mentales.

    D. Emociones: eliminar las toxinas mentales y emocionales

¿Te has preguntado alguna vez por qué las personas refrenan sus emociones?

Por ejemplo, algunos hombres están decididos a no llorar. Tradicionalmente, las mujeres son más libres en este caso, por suerte para ellas. Los niños lloran con facilidad hasta que captan el mensaje de que tienen que hacerse adultos. Para y piensa un momento por qué tenemos lágrimas, conductos lacrimales y emociones, si no hubiera una razón. Algunas personas emplastan sus poros con desodorantes para detener el sudor. De alguna forma no se dan cuenta de que las naturales y eliminatorias glándulas sudoríparas del cuerpo tienen sus razones para estar ahí, en primer lugar para refrigerar la zona y sacar fuera las toxinas. ¿Quién, por no sudar o estar secos, quiere conservar estas toxinas en su organismo? ¿Quién quiere conservar otra clase de toxinas en su mente?

Aquellos que siguen una dieta 100% de alimentos crudos dicen haber ganado una salud, tranquilidad mental y serenidad de alma que son literalmente indescriptibles. Nuestro propósito en la vida es la apertura espiritual (de nuevo, utilizamos el término «espiritual» al hablar del espíritu, no en el sentido puramente religioso). El cuerpo es una herramienta que utilizas para trabajar, para llevarte hacia las metas que te has propuesto en la vida. Cuan mejor nutrido esté el cuerpo, más despejada estará la mente y mejor carácter tendremos. Cuanto más puro esté el cuerpo, más se expandirá la conciencia. Una dieta de alimentos vivos, de alimentos biológicamente adecuados, te aportará conocimiento espiritual y aumentará las facultades del intelecto y la sensibilidad.

VI.   ASPECTOS PRÁCTICOS INVOLUCRADOS EN EL CAMBIO DE ESTILO DE VIDA: Primera parte.

A. Ser honestos con nosotros mismos

¿Por qué a algunas personas les es tan fácil cambiar y a otras les lleva tanto tiempo? Todo se remite a la verdad y honestidad. Según lo honestos que seamos con nosotros mismos así de fuerte será nuestra voluntad. Las personas que ven la verdad como una luz brillante y saben que una forma de vida natural es lo mejor para ellas pierden su falso apetito por los no-alimentos y les es fácil cambiar. Otras personas eligen ignorar la verdad. Algunos de nosotros nos encontramos en medio de los dos y vemos la verdad aunque a veces caigamos en las tentaciones. Tenemos nuestras excusas, aunque ¿acaso no estamos también eligiendo ignorar la verdad y mirando hacia otro lado?

Está claro que el camino más fácil para dejar todos los antojos es realizar un ayuno largo, después del cual a la persona le apetecerán alimentos que son buenos para ella. Algunas personas dicen que no tienen tiempo para ayunar. Todo el mundo tiene tiempo para hacer ayunos cortos, un día a la semana, por ejemplo. ¡Ojalá que todo el mundo tenga tiempo, si realmente lo buscan, para hacer uno más largo! ¿Cómo se pueden permitir no tenerlo? Debemos encontrar tiempo para nuestra salud y bienestar, ya que nadie más lo va a hacer por nosotros.

C.  Hábitos: romper la cadena

«Los humanos son criaturas de hábitos. Los hábitos son respuestas acondicionadas: la realización repetida de una acción crea un patrón mental. Desde la niñez pasamos muchos años aprendiendo respuestas ante miles de situaciones y circunstancias. Con un patrón de respuestas no tenemos que perder tiempo y volver a preocuparnos por resolver problemas  cada vez que nos enfrentamos a ellos. Una vez que hemos resuelto un problema, desarrollamos una solución como respuesta fija, automática: un hábito. Ante una situación dada inconscientemente utilizamos nuestro patrón de hábitos. Tenemos más respuestas acondicionadas para ayudarnos a superar nuestras dificultades que ninguna otra criatura viva. Sin embargo, a veces estos hábitos nos encadenan a un marco conceptual erróneo, a perspectivas distorsionadas, prácticas malsanas, etc. Por suerte e igual que los ordenadores, podemos ser programados para funcionar mejor. » (T.C. Fry, How To Reprogram Yourself for Superlative Well-Being. [Cómo reprogramarte tú mismo para conseguir un bienestar óptimo]).

Los hábitos se fortalecen con la repetición, y muchos hábitos se perpetúan automáticamente. Al igual que el péndulo que oscila hacia un extremo, en la siguiente oscilación es inevitable llegar al otro extremo. Literalmente, algunas personas siguen el ritmo del péndulo en sus vidas, despertando por la mañana con café y relajándose por la noche con alcohol. La ley de efectos duales afirma que la estimulación siempre viene seguida de una cantidad proporcional de depresión, y viceversa. Las personas que constantemente están alterando su estado de ánimo oscilan hacia delante y atrás del péndulo. Debemos devolver al cuerpo el equilibrio físico y mental, así como la armonía.

Las siguientes drogas y hábitos debilitan el cuerpo con ciclos de estimulación/depresión. Al principio, el estado alterado parece agradable; pero una vez que se convierten en adictivos ansiamos que se repita con más y más frecuencia.

Drogas duras: anfetaminas, barbitúricos, morfina, heroína, etc.

Drogas blandas: café, té, tabaco, marihuana, refrescos gaseosos con cafeína, azúcar, chocolate, refrescos gaseosos sin cafeína (llenos de sustancias químicas, etc.), especias fuertes, vinagre, sal.

Alimentos estimulantes: alimentos de procedencia animal como carne, volatería y pescado, alimentos en conserva, dulces concentrados y féculas.

Por ejemplo, la carne estimula el organismo; después, se produce la subsecuente depresión que requiere más estimulación. Debemos aprender a reconocer y dejar los malos hábitos. Cuando vemos los pasmosos efectos a corto y largo plazo de la adicción alimentaria  siempre podemos comprobar que es tan aplastante, potente y destructiva para el organismo humano como la adicción a la heroína.

Sin embargo, mucha gente se aferra a sus tradiciones culinarias a pesar de toda lógica y razón,  y de que cada vez hay más evidencias (los higienistas hacen tiempo que están convencidos) de que muchos de sus hábitos preferidos son destructivos. ¿Por qué se permiten ser títeres de caprichosos deseos, ignorando las señales de advertencia, y juegan a una especie de ruleta rusa con su salud?  Hay un viejo dicho que dice: «si quieres bailar, tienes que pagar al violinista». Algunas personas hablan de karma: lo que va, viene. Otros dicen que recoges lo que siembras o que eres lo que comes.

Los medios de comunicación han lavado el cerebro a la gente. A la hora de la cena, los anuncios muestran pesadas y picantes comidas humeantes, con el estribillo de «¿tiene hambre?». ¿Con qué frecuencia vemos un anuncio de frutas crudas, frescas o de verduras? ¡Probablemente, nunca! Debemos dudar de la salud mental de una nación que vive a base de cereales, leche, carne, azúcar, refrescos con cafeína, golosinas y alimentos procesados, que se desprende de su capa natural de piel lavándola con jabones y detergentes, la suaviza con cremas, lociones, perfumes y, como hemos dicho antes, ni siquiera quiere sudar. Los hábitos alimentarios de algunas personas incluso están regulados por el tiempo: comen corriendo y siempre a una hora determinada, más por conveniencia que porque realmente tengan hambre.

¿De verdad se está convirtiendo la gente en robots y prisioneros de acciones mecánicas? ¿Qué buscan en los alimentos? En la Unidad 16, Mike Benton habla de las asociaciones que se hacen con la comida, como sentimentalismo, seguridad, familia, recompensas, amistad, memorias de la niñez, etc.

D.  El amor es una necesidad humana básica

La gente busca un sentido familiar. También buscan refugio, el sentido de pertenecer a un territorio seguro y confiando, además de un sentido de resolución. Sin embargo, la necesidad  más importante que tiene es de amor. La gente debe tener amor, tocarse y relacionarse con otros. No desestimemos esto ni por un momento.

Si has viajado a otro país probablemente hayas notado que a los estadounidenses (sobre todo los que viven en ciudades) les gusta menos tocarse y están más preocupados con la privacidad y el espacio que los habitantes de muchos otros países. Puede que esto suene como un tópico, pero durante la última década se ha producido en este país una cada vez mayor conciencia de que hay que abrirse, como demuestran la aparición de grupos de encuentro y de toda clase de terapias que animan a la gente a abrasarse y demostrar más sus sentimientos.

¿Es posible que la tendencia que algunas personas tienen a aislarse provenga de un parto contranatural? Desde que los médicos y hospitales se hicieron cargo, el parto es cada vez menos natural. Por rutina, el ritual médico para los partos separa a los recién nacidos de sus madres y los deja solos, en el nido, y uno debe preguntarse qué precio emocional han pagado estos niños. ¿Se adaptaron y, antes que sentir un vínculo con su primera relación íntima con otro ser humano, se ajustaron a la soledad haciéndose «más independientes»? Uno solo puede preguntárselo. En esta sociedad, las familias también se separan con más frecuencia conforme se van haciendo más móviles.

No es difícil comprobar que mucha gente intente llenar ese espacio interior vacío e incómodo comiendo. ¿Por qué? ¿Acaso no es obvio que no encontramos ni amor ni afección en un banana split doble? El pensamiento consciente puede intentar coger una bolsa de patatas fritas, pero no engaña al pensamiento subconsciente. La persona no está más cerca de sus verdaderos deseos, y las frustraciones que quedaron atrás debido a esa insatisfacción simplemente se entierran más profundamente, para volver a aparecer más tarde.

¿Le suena familiar? Al igual que paliamos los síntomas de desintoxicación con fármacos, también recurrimos a los alimentos para paliar síntomas tales como la inercia, aburrimiento e inquietud y dejamos dentro las toxinas mentales en vez de enfrentarnos con nuestros verdaderos sentimientos. A algunas personas les cuesta trabajo admitir sus verdaderos sentimientos, incluso ante sí mismas. Puede que no se den cuenta de que, en el fondo, es amor y contacto lo que buscan, pero el subconsciente sabe, a pesar de que ellos no lo adviertan en su pensamiento consciente. Los juegos que las personas juegan consigo mismas exceden en mucho a los juegos que juegan con otros. Primero deben engañarse a sí mismos para engañar a otros.

Algunos de nosotros engañamos cuando «nadie nos ve» (probablemente, incluyéndonos nosotros mismos) y comemos algo que hemos intentado evitar. ¿Intentando engañarnos a nosotros mismos? Cada vez que ocurre intentamos convencernos de que «no importa» o «la próxima vez será diferente». Mientras nuestras intenciones sean buenas, estamos temporalmente fuera del atolladero. Pero la verdad es la verdad, nos guste o no. Debemos vernos a nosotros mismos como somos en realidad, no como deberíamos ser. De nuevo, nuestro pensamiento subconsciente sabe qué es lo que realmente está pasando. Si elegimos que sea nuestro pensamiento consciente el que domine al subconsciente, seguiremos presos de lo más bajo de nosotros.

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«Permanecemos aquí intentando adivinar el precio de tener que pasar por todas estas cosas dos veces…» Bob Dylan

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IV. ASPECTOS PRÁCTICOS INVOLUCRADOS AL REALIZAR UN CAMBIO EN EL ESTILO DE VIDA: Segunda parte.

A. Regla 1: Ver la verdad

La verdad está a nuestro alrededor: no cuesta nada cogerla. Abre los ojos y verás que la gente está destrozada en la flor de la vida a causa de unos hábitos de vida erróneos. Cuantos más practican y consumen, más energía vital pierden y disipan.

B. Regla 2: Vivir con la verdad

¿Cuántas veces has oído el viejo dicho de «una acción vale más que mil palabras»? O «pensé una cosa y dije otra». Una vez que conocemos la verdad, sólo estamos a medio camino de casa. Debemos enseñar a nuestro, algunas veces, poco dispuesto ego (nuestro yo más pequeño) el verdadero significado de «libertad», ese de ser tan fuertes como nuestros sueños, el de ser realmente el alma más evolucionada y radiante posible. ¿Por qué apostar por el segundo mejor?

¿Por qué? Porque eso es lo que acaban haciendo muchas personas; personas que tienen un completo libre albedrío y libertad de elección.

El instante que hay entre el deseo y la satisfacción del deseo es crucial. Los dos pueden confundirse en uno antes de que te des cuenta. Esta es la razón por la que se dice que la mejor forma de evitar la tentación es arrojarla antes de empezar a pensar sobre ella, porque una vez que le das a un pensamiento una «audiencia» dejándolo que se imponga, le has dado vía libre a tu yo emocional. En ese momento necesitarás una voluntad de hierro, porque aquí es donde alguna gente cede, algunas veces por pura frustración o irritación (y usualmente poniendo alguna excusa ante su yo más elevado).

Cuando las personas tienen las papilas gustativas insensibles, es un poco difícil ver la fina línea divisoria entre estimulación y enervación en los alimentos. Algunos están tan acostumbrados a modificar su estado de ánimo que ya no recuerdan lo que es tener un estado de ánimo normal; lo que es estar «centrado».

Si todo parece tan lógico, ¿por qué sentimos la tentación? ¿Es porque realmente no estamos seguros de si deberíamos comer algo o no? No, es porque en el fondo de nosotros estamos seguros de que no deberíamos, pero aún seguimos discutiendo con nuestro yo físico.

El yo mental y el yo subconsciente ya han aceptado la verdad. ¿Por qué algunas veces nos negamos a oír nuestra voz interior? Sólo nosotros mismos podemos saber la respuesta a esta pregunta. Nosotros sabemos hasta dónde llegaremos para seguir la verdad. O bien nos comprometemos y adaptamos nuestros principios (sabiendo muy bien que la naturaleza no adapta los suyos) o elegimos la libertad. Todos nosotros elegimos nuestro nivel de conocimiento y nuestro nivel de ser.

El conocimiento les llega a aquellos que deben tenerlo, a aquellos que lo buscan, aquellos que ven. Mucha gente pone tanta energía en no cambiar no haciéndolo, haciéndolo a medias o pensando en cambiar, como la que fácilmente podrían poner en cambiar y acabar de una vez con ese asunto.

Recuerdo una expresión china que dice: «mucho ruido en la escalera, pero nadie entra por la puerta. » En algún lugar entre los soñadores y los cínicos están los verdaderos hacedores. Una cita de Composition of Foods [Composición de alimentos] que dice:

«Nada en el mundo puede ocupar el lugar de la perseverancia. No el talento: nada es más común que fracasados con talento. No el genio: el genio sin recompensa es casi un proverbio. No la educación sóla: el mundo está lleno de derrelictos educados. Sólo la perseverancia y la determinación son omnipotentes. »

Puede que no sea fácil ver la verdad al primer vistazo, pero es simple. Cambiar es fácil cuando quieres. Tienes que amarte a ti mismo suficientemente para cambiar. (Nadie más lo hará por ti).

Respetarse, estimarse y amarse a uno mismo

La autodisciplina es una fuerza positiva. La disciplina no disminuye la vida: la aumenta. Cuando tomamos la decisión de ser fieles a nuestra herencia biológica, todas las fuerzas de la naturaleza y la propia vida nos respalda. Aprendemos a canalizar el flujo de energía y a conservar nuestra energía vital.

Aquellos que son indisciplinados agotan su importante fuerza vital y dispersan demasiado sus esfuerzos. Agotan la energía, haciendo que la vida sea más dura para ellos. La vida puede ser más fácil y la elección es nuestra.

 «Aquel que tiene una voluntad firme moldea el mundo a su gusto…» (Goethe).

«A la gente no le falta fuerza, le falta voluntad …» (Victor Hugo).

 Algunos dicen que el 5% de las personas en el mundo piensan por sí mismas y el otro 95% no.

Cuando dejes un hábito nocivo, alégrate. Si dejas el hábito de beber, no pienses «ahora ya no puedo beber más». Piensa «ahora no tengo que beber» o «ahora soy una persona libre». (Ahora estoy ahorrando dinero, ahora estoy ahorrando energía, etc.) La verdadera libertad es verse libre de necesidades. Cuanto menos necesites, más libre serás. No te estás negando nada. Te estás dando el mayor regalo de todos: vida y libertad. Has elegido ver claro.

 «Cuando puedas controlar tus gustos y apetitos, serás dueño de ti mismo»

«Serás un alma en un cuerpo, no simplemente un cuerpo con un alma» (Stanley Bass).

Durante siglos, poetas, filósofos y profetas han escrito sobre este glorioso estado del ser.

Cuando aumentes tu fuerza de voluntad, aumentará la confianza en ti mismo. Te fortalecerás hasta lograr tu mayor potencial.

No te limites simplemente a abandonar los hábitos nocivos: cultiva los buenos. No pienses que tu vida está llena de restricciones. Piensa que estás aumentando todo tu poder y energía, toda tu belleza y fuerza. Pronto descubrirás que es más fácil abstenerse que moderarse y que es más fácil dejar algo que darle rienda suelta «sólo esta vez». Se ahorra más energía. Deberíamos vivir con la naturaleza, no contra ella.

Si sentimos la tentación de «hacer excepciones», debemos preguntarnos a nosotros mismos si queremos comenzar otra vez con la cadena de hábitos, volviendo otra vez a hacer realidad todos los recuerdos y compulsiones obsesivas relacionados con ellos. No podemos estar a ambos lados de la valla. Una vez que dejamos un hábito, su recuerdo e influencia se desvanecerán con el tiempo.

Cuando realmente nos demos cuenta de que lo que comemos hoy es lo que andará y hablará mañana, sentiremos que somos «uno de los elegidos». Érase una vez un hombre que pensaba que el sol era el centro de nuestro sistema solar y todo el mundo sabía que estaba loco. Ellos sabían que la Tierra era el centro y que era plana.

En hábitos y pensamientos tú eres diferente de la multitud, pero sigue tus instintos y haz lo que sabes que está bien.

C. Regla 3: Imaginar lo positivo

Por favor, lee la sección sobre «afirmaciones» de la Unidad 16. Debemos ser conscientes de los sutiles mensajes que podemos estar mandando a nuestro pensamiento subconsciente. A veces no nos damos cuenta de que estamos expresando nuestras esperanzas positivas de forma negativa:

    Decimos              Queremos decir

Espero que no llueva              Espero que haga un buen día

Espero que no lleguemos tarde         Espero que lleguemos a la hora

No pegues portazos                Cierra despacio la puerta

Existe cierto poder en el pensamiento escrito y hablado; y existe cierto poder en la forma en la que formulamos nuestros pensamientos. Las personas con un fuerte deseo de vivir y una actitud positiva viven más tiempo, con el resto de las condiciones pasa igual.

Sonreír y reír es sano, tanto en lo que comunicamos como en lo que recibimos.

Cuando queremos fomentar el proceso de curación natural del organismo ayunando o con otro método, no deberíamos imaginar la enfermedad o los síntomas, que son una manifestación de la curación que se está produciendo, sino que debemos imaginar el cuerpo en su estado sano, imaginarlo con una luz positiva, verlo como queremos que esté. Hay quien incluso dice que visualiza la curación como una luz blanca que rodea la zona, protegiéndola. La idea es concentrar la energía positiva sobre el cuerpo. Esto es muy diferente a concentrar sobre él la energía negativa. Cuando nos preocupamos de los síntomas, estamos, literalmente, reforzando nuestro estado enfermo, dejando que nuestra fuerza se vaya con nuestros pensamientos.

Un rápido vistazo a las dos siguientes formas de vida, la negativa y la positiva, nos convencerán de una vez de ir al lado de la fuerza vital, la positiva.

Negatividad

Mente estrecha

Mal, venganza

Mezquindad, prejuicios, intolerancia

Inflexibilidad

Apatía, indiferencia, vaguedad

Pesimismo, mal humor

Conversación negativa, chismorreo

Disipación de energía

Orgullo, santurronería, arrogancia

Autocompasión

Ataduras, envidia, celos

Enfermedad

Rabia

Odio

Ansiedad, nerviosismo, tensión,

Deshonestidad, engaño

Engañarse a sí mismo, ignorancia

Paranoia

Miedo

Caos

Egoísmo, avaricia

Ataduras

Violencia, guerra

Regresión

Destrucción

Pérdida de poder, muerte

Positivismo

Mente abierta

Bien, perdón

Tolerancia

Cambio, fluidez, flexibilidad

Vigor, fuerza

Visión positiva

Conversación positiva

Concentración de energía

Humildad, respeto por uno mismo

Autoestima

Despego

Salud

Alegría

Amor, tacto, cariño

Serenidad, armonía, equilibrio

Honestidad, verdad

Clarividencia, perspicacia, sabiduría, comprensión, claridad

Confianza, fe, esperanza,

Coraje

Unidad, simplicidad

Generosidad

Libertad

Paz

Evolución, progreso

Creatividad

Aumento de las facultades, vida.

    «Espejito, espejito, ….

    ¿Quién es la más bella de todas?»

La clave para la regla 3 está en la imagen positiva que tengamos de nosotros mismos en nuestra mente. Cuando vemos esta imagen, veremos cómo nuestra forma de comer inadecuada y compulsiva del pasado distorsionó nuestro cuerpo y mente y demostraba una falta de amor por nosotros mismos, al igual que un estilo de vida de evasión. Experimentamos lo que creemos, así que debemos creer que somos merecedores, atractivos, deseables y encantadores. Debemos crear la imagen de nuestro yo más elevado. Si lo hacemos, entonces nos convertiremos en nuestro yo más elevado.

Si miras a alguien que tiene éxito verás que tiene una fe absoluta en su capacidad para triunfar. Debes tener fe en tus poderes inherentes. No eres simplemente una «víctima del destino». Recuerda que lo que pasa al subconsciente puede traducirse en acción. Como hemos dicho, los pensamientos negativos se construyen sobre sí mismos. Si tienes pensamientos de fracaso y dudas de tu capacidad para triunfar, generarás energía negativa. Muchas de tus ansiedades se harán realidad. «Como piensas, serás».

No pensemos negativamente. Al contrario, cultivemos pensamientos positivos y creemos un flujo constante de energía positiva. Nosotros decidimos con qué humor colorear nuestros pensamientos. Es mejor elegir amigos, libros, películas y pensamientos que alimentar nuestra mente y aspiraciones. Cuando miramos cualquier alimento o bebida y no podemos responder a la simple pregunta de «¿Qué bien nos hará esto?» entonces, deberíamos dejarla ir inmediatamente. Los antiguos hábitos y muletas sólo se interponen en el camino de nuestra liberación. Un buen y positivo estilo de vida se convertirá pronto en hábito, una práctica tan sólida como el estilo de vida que hemos reemplazado.

D. Regla 4: Ingiere una dieta óptima y vive según tu mandato natural

En unidades anteriores, hemos comentado la dieta de fruta cruda y fresca, verduras, frutos secos y semillas, así como la necesidad de hacer mucho ejercicio, tomar el aire fresco y la luz del sol.

E. Regla 5: Recuerda las simples alegrías de la vida.

No sólo son gratis, sino que son divertidas. En un estilo de vida positivo encontraremos mucha alegría. Cantar, bailar, la música, jardinería, el arte y toda clase de creatividad no son más que unas pocas de las alegrías de la vida. Cuando cantamos y bailamos, nos unimos con el universo en su gran canción, la eterna fuente de vida.

F. Regla 6: Date a ti mismo

En un documental televisivo sobre la vida de la Madre Teresa en India, se dijo que ella había enviado nuevos voluntarios a trabajar en los hogares que había fundado para los moribundos. Uno de esos voluntarios llegó a ella, un hombre de mediada edad que su médico le había dicho que iba a morir debido a una afección cardiaca. Parece que decidió ponerse al servicio de la humanidad antes de partir, pero tras trabajar más y más con otras personas y olvidarse de sí mismo, el estado de su corazón cambió y se puso bien. (Conocemos el papel que desempeña la dieta en las afecciones cardiacas, pero algunos estudios también han relacionado los problemas cardiacos con personas obsesionadas con ellas mismas y con el tiempo, ambas circunstancias añaden tensión a sus vidas.)

La persona que no se entrega a sí misma de buena gana también padece una especie de afección flemática. Entregarse uno mismo es a veces más duro que entregar nuestras posesiones. De cualquier forma, la mayoría de las personas se entregan a las personas que eligen, a las que son merecedoras de recibir su generosidad. Deberíamos entregarnos con la misma disposición a los extraños, puesto que son iguales que cualquier ser vivo.

Jalil Gibran dice lo siguiente sobre darse uno mismo:

Cuando te das a ti mismo es cuando das realmente.

 Porque ¿qué son tus posesiones si no cosas que conservas y guardas por miedo a que puedas necesitarlas mañana?

Y ¿qué es el miedo a la necesidad sino la propia necesidad?

¿No es el terror a la sed que sientes cuando el pozo está lleno la sed que es insaciable?

Hay aquellos que dan poco de lo mucho que tienen —lo hacen por el reconocimiento y su oculto deseo hacen que sus regalos sean indeseables.

Y existen aquellos que tienen poco y lo dan todo.

Son aquellos que creen en la vida y en la bondad de la vida y su cofre nunca está vacío.

Están aquellos que dan con alegría y esa alegría es su recompensa.

Y están aquellos que dan con dolor, y ese dolor es su bautismo.

Y ¿Hay algo que retendrías?

Todo lo que tienes será dado algún día.

Por tanto, dalo ahora, que la estación de dar pueda ser tuya…..

Los árboles de tu huerta dicen nada de eso… ellos dan para poder vivir, porque retener es perecer.

Seguro que aquél que es merecedor de recibir sus días y sus noches, es merecedor de todo lo demás que tienes.

Y aquel que ha merecido beber del océano de vida merece llenar su copa de tu pequeño arroyo.

Porque en verdad es vida lo que da vida, mientras tú, que te consideras a ti mimos un dador no eres más que un testigo. »

Vivir con más de lo que necesitamos

Los ricos ¿quién no se ha preguntado que hacen con tantos millones de dólares? En nuestra búsqueda de seguridad deberíamos detenernos y reflexionar un momento. Cuanto más fácil sea para nosotros, más deberíamos averiguar qué podemos hacer por los demás.

Incluso cuando sintamos apuros económicos, siempre podemos estirar el dinero y siempre hay alguien que tiene menos.

Cualquiera que viva con más de lo que necesita para cubrir sus necesidades básicas está siendo egoísta si no comparte. Al igual que el organismo con un exceso de alimentos se satura abotarga o intoxica, el espíritu de una persona se enturbia cuando tiene más de lo que necesita para salir adelante. Si uno tiene salud, la felicidad aparece de forma natural. Más allá de esto, ¿qué podrá comprar el dinero? Ni siquiera puede comprar eso, y esto se ha dicho de tantas formas que ahora parece que lo damos por hecho. No obstante, a veces perdemos la perspectiva cuando buscamos la seguridad.

Algunas de las personas más generosas que me he encontrado durante mis viajes por otros países son personas que no tenían casi nada.

Si puedes aprender a ser feliz sin nada, piensa lo que podrías hacer si tuvieras algo.

Regla 7: Relax

Si quieres mantener el ritmo con un mundo que se está movimiento más aprisa que nunca, lo mejor que puedes hacer es relajarte. La generación más joven es, instintivamente, más abierta de mente y más activa porque tiene adaptarse a un cambio y una expansión constante. Siempre deberíamos ser tan flexibles, tolerantes y adaptables como sea posible y desprendernos de nuestras ataduras. No contenemos la respiración si queremos vivir y debemos soltar el aire y volver a coger otra bocanada. Deberíamos ser así de flexibles en nuestro yo más profundo. No queremos que nuestro cuerpo físico o nuestra mente sean rígidos, estén contenidos o atados a una idea, sino que sean tan cambiantes, evolucionistas y activos como la propia vida.

Las emociones negativas sólo son útiles mientras puedan motivarnos a realizar acciones positivas. Un breve momento de ansiedad hace que nos demos cuenta de que haya algo que necesita atención. La adrenalina estimula al cuerpo para que actúe. Las emociones negativas también pueden servir como una liberación de la represión, una limpieza. Sea cual sea su objetivo, siempre que persistan y duren minutos y horas, empezamos a agotar nuestra energía y a debilitar de forma innecesaria el organismo. La ansiedad (o lo que sea) sola, sin acción, es inútil una vez que su propósito inicial, el de servir como advertencia se ha llevado a cabo.

Mientras ignoremos el estrés no estamos en un estado de bienestar mental. La presión constante nos daña al interrumpir el flujo natural, tanto a nivel mental como físico. Nuestro cerebro se distrae y debilita. El sistema nervioso autónomo pierde el control. Podemos sentir la garra del estrés en nuestros cuellos, hombros, músculos faciales, pies, manos. Debemos liberarnos de esta garra.

El miedo al fracaso puede hacernos sentir tan amenazados como si estuviésemos en medio de la vía del tren y este se aproximara. Tu cuerpo no puede saber la diferencia: simplemente siente el estrés. En una situación de estrés crónica a veces se producen crisis que rompen el ciclo. Por ejemplo, una enfermedad obligará a la persona a descansar, ya que tendrá una excusa para quedarse en la cama o no hacer nada.

¡Si sólo no hacer nada fuese tan fácil! Algunas personas temen que quiera decir que son apáticos o vagos. Han olvidado que uno puede no hacer «nada» de forma creativa. Despejar el espacio mental e introducirnos en el universo interior durante un momento difícilmente se puede llamar «nada». La gente simplemente debería acordarse de relajarse.

La simple repetición de un sonido puede relajar el cuerpo y la mente. Durante la meditación, la respiración se hace más lenta. El ritmo cardiaco disminuye. La sensación es calmante y relajante. La relajación es el resultado. Sabemos que debemos adoptar unos buenos hábitos alimentarios para tener salud, pero merece la pena advertir que se ha demostrado que la meditación provoca cambios tanto en el nivel físico como en el mental. Estudios han demostrado que disminuye las contracciones cardiacas irregulares, en particular las taquicardias  ventriculares y que puede reducir el número y la intensidad de los ataques de ansiedad.

El insomnio, la tensión y la migraña, así como otra clase de dolores pueden disminuir. La meditación ayuda a bajar la presión sanguínea en los hipertensos, y ha ayudado a drogadictos, alcohólicos y fumadores. Ha sido eficaz al tratar problemas del habla como la tartamudez. Un estudio demostró una reducción significante de los niveles de colesterol en sangre tras once meses de meditación diaria. Los que hacen yoga y se toman la meditación en serio pueden aprender a controlar el pulso, las ondas cerebrales, la presión sanguínea, el ritmo cardiaco, la conducción dérmica, la tensión muscular, la circulación periférica y el ritmo respiratorio.

Mi intención al mencionar esto no es sugerir que la meditación debería sustituir la corrección de los hábitos alimentarios, sino que gracias a la meditación podemos aprender más sobre las facultades de la mente, y esto puede ayudarnos en todos los niveles. Seremos bien recompensados si conseguimos tanto salud física como crecimiento mental, ya que van cogidas de la mano. La meditación es una herramienta maravillosa para llegar a conocernos a nosotros mismos.

Elige un lugar tranquilo donde no te molesten y ponte cómodo sentándote o tendiéndote. Cierra los ojos y deja vagar la mente. Deja pasar todo pensamiento y sosiega la mente. Al principio te sorprenderás de la frecuencia con la que tus pensamientos conscientes intentaran imponerse, acostumbrados como están a inquietar tu estado de vigilia normal. Pero sigue dejando pasar cada pensamiento. Intenta hacer esto durante 15 o 20 minutos dos veces al día como mínimo. Puedes hacerlo con tanta frecuencia o durante tanto tiempo como quieras. Con el tiempo comprobarás cómo se producen más y más cambios en la calidad de tu estado de meditación. Algunas personas leen libros sobre conocimiento psíquico pero estos libros sólo pueden describir distintas dimensiones de pensamiento y por sí mismos no pueden llevar el conocimiento a la persona. No todas las personas dotadas con mentes sensibles están educadas por libros. Al igual que un ayuno (con una eliminación temporal de alimentos) renueva y revitaliza todo el organismo, también la meditación (eliminación temporal del pensamiento consciente) refresca la mente y eleva el espíritu.

Una dieta pura, aire fresco, luz del sol, baños calientes, nadar, bailar, pasear, acampar, jardinería, ejercicio, reír (y llorar) y el humor: todo esto son formas posibles de superar el estrés. Los masajes suaves también pueden ayudar. Se debe tener cuidado y evitar los masajes fuertes. Esto puede provocar una estimulación excesiva, debilitación y un posible daño. En los masajes suaves se activan el tacto y los factores humanos. Hay algo magnético y humanitario en el tacto con otra persona que produce maravillas. El amor es verdaderamente curativo.

El ejercicio debería incluir algún ejercicio aeróbico que haga que el corazón bombee y active la circulación. En un libro había una anotación interesante sobre la longevidad y que decía que en una zona en la que vivía mucha gente mayor, los hombres vivían 20 años más que las mujeres, siendo el estilo de vida igual en ambos. Cuando se investigó más profundamente se encontró una diferencia: las mujeres solían andar por la casa, sobre una superficie plana, mientras que los hombres subían y bajaban por las empinadas colinas la mayoría de sus días. Ellos tenían los músculos de las pantorrillas bien desarrollados, fuertes, lo que hacía que bombearan con más fuerza la sangre hacia el corazón: su circulación era mejor. Así que incluso cuando andamos y realizamos los trabajos de casa y de jardinería, haciendo mucho ejercicio «pasado de moda» también debemos hacer algo que tenga un poco más de chispa.

Cuando no corro o nado, encuentro que bailar en casa es una buena forma de activar el corazón y realizar una variedad de movimientos. Mi opinión personal es que la gente se pierde un montón de diversión cuando reservan el baile para las ocasiones especiales o fiestas, o para cuando pueden encontrar una pareja.

H. Regla 8: tómate tu tiempo

El tiempo no existe tal y como lo definimos en términos humanos. De hecho, incluso difiere de un individuo a otro, de un niño a un campesino que pasa el día en el campo a un ejecutivo que se pasa el día mirando el reloj.

Antes de cumplir un año de edad vivimos en un eterno presente. Con dos años más o menos aparece el «hoy»; con los dos y medio, el «mañana»; la «tarde» y «ayer» aparecen con 4 años y el concepto de «días», con 5.

Jalil Gibran dice del tiempo:

    Medirías en tiempo lo mensurable y lo inmensurable.

Sin embargo, lo eterno en ti es consciente de la eternidad de la vida, y sabe que ayer no es más que el recuerdo de hoy y mañana es el sueño de hoy.

Y que lo que canta y contempla dentro de ti todavía está viviendo dentro de los límites de ese primer momento que dispersó las estrella por el espacio.

La física cuántica dice que todo es uno y que el tiempo no es linear. La física moderna dice que el espacio y el tiempo existen juntos al mismo tiempo, como si fuesen un bloque, sin que haya separación en el bloque. Somos nosotros, como individuos, los que dividimos el tiempo en segundos, minutos, horas, días, semanas, meses, años y el infinito. Mientras que cada vez hay más personas obsesionadas y dominadas por el tiempo y que se lamentan de que les «falta», parece que los niños, los pueblos primitivos y las personas religiosas y místicas viven en un presente eterno y continuo. Cuando el tiempo deja de fluir en los fragmentos creados por nuestras palabras, nos envuelve la inmovilidad de la que han hablado todos los grandes místicos.

Cuando no estás viviendo en el ahora y te deslizas en el pasado o en futuro, vives en un tiempo que no es el tiempo real del momento. Cambia tu centro, por lo que ya no estás centrado, en equilibrio.

Cuando piensas en el tiempo ¿no parece que el pasado año pasó más rápido que el anterior? ¿Con frecuencia, te das prisa para acabar la cosas y temes que nunca tendrás suficiente tiempo? ¿Qué es suficiente tiempo? Puedes estar seguro que cada uno de nosotros tiene todo el tiempo que necesita.

Si dejas que tu mente pegue un salto y se desplace al año 3000 verás en perspectiva la importancia que tiene que el florero, o lo que sea, tenga polvo. Si miras a las hormigas, verás cómo algunas se pierden en una ramita durante un tiempo que parece una eternidad, haciendo quién sabe qué. A veces, nosotros somos como estas hormigas, distraídos en nuestros rincones, rellenando nuestro tiempo con toda clase de ajetreadas ocupaciones que nos parecen importantes. Debemos sobrevivir y encontrar nuestras prioridades en la vida. Pero en nuestra prisa por sobrevivir no debemos olvidarnos de VIVIR. Al menos una vez al día (¡si no más!) acuérdate de simplemente vivir, sólo vivir, no hacer. Deja de escuchar solamente tu constante corriente de pensamientos. Es igual que pasarte todo el día mirándote en un espejo —ciertamente a la mayoría de nosotros no es algo que nos vuelva locos—. Sal de ti mismo y escucha los pájaros, el viento, el silencio y oirás otras voces hablar.

Siente la fuerza de la vida en tu interior. Recuérdate que debes «reducir la velocidad» durante un momento, el suficiente para disfrutar del milagro, porque tu participación en vida de este gran universo es verdaderamente un milagro. No dejes que la vida se te escurra entre los dedos como la arena, porque una vez que se ha ido ya es demasiado tarde y nunca la viviste. No esperes la vida. Siéntela. Deja de perder el tiempo preocupándote sobre el tiempo. Un amigo mío con 81 años me dijo a los 31, cuando yo me lamentaba por no tener suficiente tiempo: «No te preocupes, tendrás todo el tiempo que necesitas cuando estés muerto. » Asimismo, tenemos todo el tiempo que necesitamos para vivir. Así que debemos vivir nuestras vidas completamente, con calidad, no cantidad.

John Lennon dijo:

    «La vida es lo que pasa cuando estamos ocupados haciendo otros planes»

V. UTILIZAR LA PSICOLOGÍA CON OTROS

La mayoría de nosotros ha intentado en una u otra ocasión convertir a alguien para que siga un regimen de salud o utilizar la psicología inversa[1] con los niños, todo ello con distinto grado de éxito o fracaso. También todos nosotros conocemos a alguien tan testarudo que sería mejor hablarle a la pared. Tendremos que aprender cuando debemos persistir con la esperanza de hacerlo cambiar de idea o cuando olvidarnos de nuestra necesidad de cambiar a alguien.

Todo el mundo tiene las mismas oportunidades de ver la verdad. Aquellos que no la ven son como aquellos que tienen los ojos cerrados cuando pasa una estrella fugaz. ¿Acaso pueden decir que no paso porque ellos no la vieron?

Siempre es triste que aquellos que queremos no vean lo que nosotros vemos que es la verdad. Todos nosotros conocemos a alguien que padece una enfermedad y al que nos gustaría ayudar si pudiéramos… si escuchase….. si entendiera…….

Es difícil saber qué decir, pero si sostuvieras un volumen de buena poesía enfrente de una persona que no sabe leer y de dos personas que sí saben, una vería palabras, otra leería palabras y otra leería también entre líneas, profundizaría más.

Sería difícil hacer que el libro fuese algo más que un libro para aquel que no sabe leer. Puede que no sea más que un libro para aquel que puede leer, pero que tiene menos comprensión. La tercera persona, la que ve más allá, está en realidad hablando con el autor del libro.

¿Cómo poder explicarle el éxtasis que sientes tras escuchar una pieza de música a alguien que no la siente? ¿Cómo explicar a alguien que está resfriado que el olor de las violetas está haciéndote delirar de alegría? ¿Cómo explicarle el color a una persona ciega? En todos estos ejemplos, uno puede trascender más allá de las palabras a otro significado, pero diferentes personas responderá de forma diferente a los mismos estímulos. No podemos esperar que todo el mundo vea lo que nosotros vemos incluso aunque miren en la misma dirección. Incluso aunque enseñes el mismo objeto, la gente lo ve diferente.

Esto es lo que debemos recordar cuando nos enfrentemos con personas que ven y entienden de forma diferente, y no obsesionarnos con hacerles cambiar de idea. Hemos visto padres intentando hacer cambiar a sus hijos, niños intentando hacer cambiar a sus padres, esposas y esposos intentando cambiarse mútuamente, amigos que siempre intentan hacer cambiar a sus amigos, la lista es interminable. Siempre hay alguien que sabe más. Ruegan y suplican o, si esto no funciona, intentan alguna artimaña o, por último, abandonan o se enfadan.

Depende de nosotros decidir en cada situación individual cómo manejar la conversación sobre el estilo de vida. Una vez que hayamos hecho conocer la verdad, cada persona cambiará sólo cuando esté preparada para hacerlo. Para algunos de nosotros ha sido duro cambiar, así que deberíamos entenderlo bastante bien cuando vemos que les pasa a otros. El Dr. Albert Schweitzer decía: «El ejemplo no es sólo la mejor forma de enseñar: ¡es la única forma!» Cambiemos nosotros primero y dejemos que otros vean por sí mismos qué es la verdad, manifestada en nuestro ejemplo. La verdad es evidente por sí misma. Cada persona decide si quiere vivir dejándose guiar por ella. Me acabo de acordar de la letra de una canción de la última década: «un hombre oye lo que quiere oír y hace caso omiso del resto». Ciertamente verdad: pero esperemos que algunos de nosotros pueda hacer algo más que eso.

Las siguientes pautas te ayudarán a tratar con otras personas cuando surjan los temas de la dieta y del estilo de vida:

A: Cosas que debes hacer y que no debes hacer

    Debes hacer                       No debes hacer

Relajarte                             No te pongas tenso

Hablar despacio, con calma        No hables muy rápido, con nerviosismo o discutiendo.

Evita discutir sobre temas espinosos

durante la cena                       No sermonees.

Sugiere lo que tú harías,

menciona lo que comes o no comes  No le digas a otros «haz esto o aquello» de forma dogmática simplemente porque tú lo haces.

Sé paciente                       No pierdas la paciencia

Sé sutil                          No seas rudo u ofensivo

Conserva el sentido del humor     No agobies a otros con tu seriedad.

Haz aquello en lo que creas       No intentes probarte a ti mismo ante los demás.

Sé tolerante y comprensivo        No seas demasiado crítico.

«caza moscas con miel»            No hagas que la gente odie la Higiene Natural.

Sé humilde                        No seas orgullo, un «lo sé todo»

Sé consciente de tus límites      No te excedas en tus «conferencias» sobre salud.

Sé consciente de las reacciones de los demás   No prediques en el desierto

Ten en cuenta cuánto quieren oír los demás

¿Quiere esa persona tu consejo?

Quien lo quiera se sentirá más inclinada a

escuchar y absorber lo que dices que alguien a

quien obviamente no le interesa nada.

Sé optimista y positivo           No enfoques una charla sobre salud con una actitud negativa de «fuego y azufre»

Sé amable aunque te contraríen    No pierdas los nervios o te enfades cuando alguien no entienda algo.

D. «¿Soy el guardián de mi hermano?

¿Hasta qué punto somos responsables de divulgar la verdad? Ya hemos hablado de dar un buen ejemplo. Para la mayoría de nosotros el poder del pensamiento colectivo es apenas reconocible, no digamos comprensible. Todos estamos muy ocupados viajando a través del tiempo y el espacio, como millones de viajeros en un viaje hacia el futuro, un futuro que nos espera con el crecimiento de la población, extinción de especies, ordenadores, robots, viajes por el espacio, ingeniería genética, implantes y aparatos protésicos, más drogas y lo desconocido. ¿Dónde encajaremos? ¿Cómo pueden los niños de la naturaleza tener una sana perspectiva?

Cuando los primeros colonos llegaron a América estaban muy apasionados con sus creencias, preparados para hacerlas realidad en el próximo mundo. En la actualidad el planeta es mucho más pequeño y ya no nos quedan muchos nuevos mundos. Lo que nosotros hacemos ahora influye sobre cada uno de nosotros mucho más que de lo que jamás hiciera antes.

Puede que pensemos que sólo somos responsables de nosotros mismos, pero este espejismo es el responsable de la destrucción de nuestra fuente de vida: nuestro planeta. No debemos dejar que esto suceda. Somos responsables de nosotros mismos y de los demás. El planeta necesita ser curado y la gente necesita vivir en paz.

Lar armas tienen una forma de ser muy antihigiénicas, incluso para las personas que comen frutas crudas, verduras, frutos secos y semillas. Mientras estamos preocupándonos por el precio de los zapatos y sobre quien va primero en la liga, o planeamos nuestra dieta perfecta, hay personas muy ocupadas tomando decisiones por nosotros, decisiones muy graves. Ellos tienen nuestro destino en la palma de sus manos. Aquellos de nosotros que vemos con claridad, vemos que al igual que los médicos hipnotizan al público con buenas palabras y fármacos, nuestros líderes mundiales están intentando convencer a las masas de que más armas pueden prevenir la guerra. La continúa adición de armas cada más complejas y mortales al arsenal de armas que ya tenemos ha creado un potencial tan destructor (en este momento el planeta podría destruirse no una vez, sino varias) que es igual que mantener una botella de arsénico en el botiquín para «prevenir un resfriado».

Hay una adivinanza que dice: «si estamos en una habitación cerrada con una fuga de gas y tenemos cuatro cerillas ¿cuántas debes encender para provocar una explosión?» Está claro que la respuesta es sólo una. Los defensores de que no se construyan más armas nucleares han estado intentando decirnos algo.

Por tanto ¿qué clase de cambio en el estilo de vida debemos hacer? ¿Debemos dejar las golosinas y darnos una palmadita en la espalda? ¿O debemos aprender a entretejer nuestros cuerpos físicos, nuestras mentes y almas en el sano tapiz de la vida de la forma más hermosa que podamos imaginar? Seremos lo más grande de nosotros mismos, unidos unos con otros por todo el planeta.

Alarguémosles la mano a aquellos que necesitan ayuda. Cuando más amor salga al mundo, más curación se producirá. No hay mejor propósito en la vida que ayudar a otros como nos ayudaríamos a nosotros mismos.

PREGUNTAS SOBRE LA UNIDAD

PREGUNTA: Hay demasiado sufrimiento: teniendo compasión ¿cómo puede uno quedarse en paz?

RESPUESTA: ¿Usted piensa que es diferente al resto del mundo? ¿Acaso no es usted el mundo? El mundo que usted ha hecho con su ambición, avaricia, con su seguridad económica, con sus guerras: lo ha hecho usted. La tortura de animales para conseguir su comida, el desperdicio de dinero en guerras, la falta de una buena educación: usted ha construido este mundo, es parte de usted. Así que usted es el mundo y el mundo es usted: no hay ninguna división entre usted y el mundo. Usted pregunta: «¿Cómo puedes tener paz cuando el mundo sufre?» ¿Cómo puede usted tener paz cuando usted está sufriendo? Esa es la cuestión, porque usted es el mundo. Puede ir por todo el mundo, hablar con seres humanos, ya sean inteligentes, famosos o analfabetos, todos están pasando una época terrible: al igual que usted. Así que el asunto no es ¿cómo puede usted estar en paz cuando el mundo está sufriendo? Usted sufre y, por tanto, el mundo sufre. En consecuencia, ponga fin a sus sufrimientos, si sabe cómo hacerlo. El sufrimiento, junto con la autocompasión que le acompaña, finaliza sólo cuando uno se conoce a sí mismo.

(J. Krishnamurti)

PREGUNTA: ¿Qué más puedo hacer una vez que cambie mi estilo de vida?

RESPUESTA: Canalice alguna de su energía en uno de los siguientes esfuerzos para salvar el planeta: nuestro hogar y nuestra fuente de vida.

·        Mantén limpio el entorno

·        Recicla

·        Utiliza energía solar y otras fuentes de energía alternativa

·        Ayuda a liberar los animales de la explotación, en los laboratorios y en las granjas.

·        Guarda semillas, sobre todo semillas polinizadas al aire libre.

·        Jardinería orgánica

·        Planta árboles, sobre todo frutales y de frutos secos

·        Planta flores

·        Enseña a otros

·        Música, danza, belleza, arte.

·        Ama a los demás

·        Acoge a los necesitados

·        Ayuda a los demás.

TRABAJA POR LA PAZ MUNDIAL

«… el asunto más importante al que ahora se enfrenta la especie humana. » (Dra. Helen Caldicott) («Ningún sistema que instantáneamente garantice la destrucción de millones de hombres, mujeres y niños inocentes es moralmente aceptable.») (Bishop Leroy Matthiesen of Amarillo, Texas)

Para más información sobre la paralización de las armas nucleares en tu Estado llama a Clearinghouse at 314-533-1169) o pregunta en alguna tienda de alimentación sana de tu zona: alguien sabrá sobre las actividades locales que se realizan al respecto.

La Campaña para el Desarme Nuclear de los Niños (Box 550, RD#1, Plainfield, VT 05667) tiene seis organizadores con edades comprendidas entre los 12 y 22 años y anima a los niños a escribir cartas a los líderes políticos.

RESUMEN

Cuando comencé esta unidad, quería encontrar la llave mágica que abriría todas las puertas y le concedería inmediatamente a todo a aquel que quisiera cambiar el regalo de la fuerza de voluntad. Pensé en dar una lista de trucos para ponerlos en práctica cuando se intentan dejar los hábitos nocivos.

Pero todo el mundo es diferente y lo que funciona para unos no funciona para otros. Todo el mundo tiene un grado distinto de fuerza de voluntad.

Una vez conocí a un hombre que me dijo que hacía un año que había dejado el hábito de fumar. Durante meses fue disminuyendo progresivamente el número de cigarrillos hasta que al final bajó a un cigarro al día. Entonces, le daba caladas a este único cigarrillo y lo encendía y apagaba durante el día. Después, de alguna forma, llegó a cero, y se mantuvo ahí. Su sistema le «funcionó», pero otras personas se quitan de golpe, sin tontear. Así que todo se reduce a que la persona tiene que querer cambiar y cambiará cuando esté preparada, una vez que se haya decidido realmente a cambiar. Sí, todo está en la mente.

Cuando dependemos de la verdad para vivir, habremos elegido ser libres. Muchas personas simplemente se dejan llevar por la corriente, no importa dónde vaya. Hay un dicho que dice: «Los peces muertos flotan corriente abajo, pero un pez tiene que estar vivo para nadar corriente arriba. »

Debemos aprender a vernos objetivamente. Cada vez que nos pongamos una excusa veremos lo que estamos haciendo. Hace falta algo más que conocer la verdad para cambiar un estilo de vida. Se necesita controlar la verdad: debemos practicar hasta que se convierta en un hábito. Debemos hacer lo «positivo» una y otra vez.

Cuando fallamos en algo no deberíamos censurarnos. Al igual que pasa con una cadena, somos tan débiles como el más débil del eslabón, pero también somos tan fuertes como nuestro eslabón más fuerte.

Abracémonos unos a otros y a todos las criaturas vivas, en paz y armonía, y trabajemos juntos en este planeta para mejorar la vida. Esto es lo que nosotros, niños de las estrellas, estamos llamados a hacer, ser lo mejor que podamos ser y recordar que somos todos uno en espíritu. Conforme a cada persona se le vaya revelando la verdad y vaya generando el mejor estado de salud posible, el planeta se curará y veremos el comienzo del paraíso: un nuevo amanecer para la especie humana.

Sé que todos os estaréis preguntando si esto puede ocurrir esta semana, o deberíamos darle un mes o más.

Lo importante es que creamos que está llegando lo bueno, para así poder hacerlo realidad. Hoy en día, tenemos muchas razones para dudar, temer o preocuparnos. Pero si nos abandonamos a una actitud de desesperación, entonces el temor de que esta actitud se haga realidad es sólo cuestión de tiempo. Así que debemos adoptar la parte positiva, porque es nuestra única elección para poder sobrevivir. No importa qué temamos, cuáles sean nuestras preocupaciones: en nuestra mente debemos imaginar una y otra vez el planeta en paz, y también hacer algo para que esto se haga realidad.

Debemos creer en lo bueno y luchar por lo bueno, y el resto será historia.

TEXTOS SUPLEMENTARIOS
Aquel que ama vive en un mundo de amor;

Aquel que es hostil vive en un mundo de hostilidad;

Extractos de Ahimsa[2]
Respeto por la vida, y la Regla de Oro

La frase la inventó el Dr. Albert Schwitzer y lo hizo para describir su creencia de que la vida tiene valor: que la vida es una experiencia rica y provechosa para todos aquellos que beban de ella; y que no existe ninguna vida inútil. Probablemente lo más grande de todo sea la Regla de Oro: que deberíamos comportarnos con los demás como nos gustaría que los demás se comportaran con nosotros.

La Regla de Oro en siete dogmas del mundo

Hinduismo

«Los hombres dotados con inteligencia… siempre deberían tratar a los demás como a ellos les gustaría ser tratados. »

Budismo

«De cinco maneras un miembro del clan debe ayudar a sus amigos y familiares: con generosidad, cortesía y benevolencia; tratándolos como él se trata a si mismo y siendo tan bueno como su palabra. »

Taoísmo

«Considera las ganancias de tu vecino como ganancias propias y considera las pérdidas de tu vecino como pérdidas propias. »

Confucianismo

«Lo que no quieres que te hagan, no lo hagas a otros. »

Judaísmo

«Debes amar a tu prójimo como a ti mismo»

Cristianismo

«Cualquier cosa que quieras que los demás hagan por ti debes hacerlas tú por ellos»

Islamismo

«Ninguno de vosotros es un creyente hasta que quiera para su hermano lo que quiere para si mismo»

La persona que tiene una mente controlada y serena, una disposición agradable y tranquila, una rápida y sincera sonrisa para los demás, comprobará cómo le sonríen los demás. Las buenas personas desconfían por instinto de aquellos que irradian miedo y odio, pero aquel que demuestra una amor universal lo comunica a los demás.

En esta época moderna de comunicación de masas, se ha desarrollado en muchas mentes una insensibilidad general, una forma de mecanismo de defensa o reacción ante el exceso de estimulación que reciben nuestros sentidos con las artimañas visuales y auditivas. La Regla de Oro sigue siendo lo real.

La insaciable curiosidad del hombre lo ha llevado a la conquista del espacio y a las estrellas, pero el hombre debe controlar su yo más inferior antes de poder hacer realidad su potencial. Y debe hacer ambas cosas antes de estar PREPARADO para poder dominar la Tierra, el mar, los cielos y el espacio exterior, por no hablar de controlar a otros seres vivos como animales, pájaros y peces. El hombre reclama un dominio absoluto sobre todo aquello que respire, vaya a cuatro patas, corra, vuele o nade, pero se ha preparado mal para asumir este puesto real y en cambio más bien parece un pequeño tirano. Sin la primera conquista del «espacio interior» —la conquista por hombre de sí mismo a nivel individual— lo único que estamos haciendo es soltando un monstruo con por poco sentido de la moralidad, justicia, imparcialidad y bondad. ¡Si el hombre simplemente dejara de intentar tanto saber e hiciera más esfuerzos por comprender! Si sólo pudiéramos comprender que el universo no es malévolo y que el hombre puede vivir en amor y compasión sin perecer. De hecho, parece que lo más probable es que muera si NO practica en un grado suficiente estos virtuosos atributos.

En cualquier caso, no podemos tener ambas cosas: el hombre no puede pretender tener más ética, espiritualidad, desarrollo o civilización que otras criaturas y al mismo tiempo vivir con unos valores más bajos que un buitre o una hiena. La verdad del asunto es que ya es más que hora de que el hombre deje atrás su naturaleza más baja y bruta y saque su yo más noble.

La humanidad ha estado demasiado tiempo en la jungla. Al igual que les pasa al topo o al búho cuando miran el sol brillante, en la actualidad estamos tan cegados por el brillo de lo que puede acontecer en el futuro que preferimos la comodidad de nuestra posición actual. Estamos poseímos por una gran inercia: nos aferramos a lo que pensamos que sabemos antes que probar con aquello que aún no entendemos por completo. Pero el mundo es algo más que una jungla: podemos salir de la oscuridad a un maravillo sol y tras un rato acostumbrarnos a la luz.

Nunca conseguiremos salir realmente de la jungla hasta que no rompamos las cadenas que nosotros hemos forjado para nosotros mismos y que con tanto orgullo llevamos y mostramos: los miedos, la ignorancia y la autocomplacencia.

Todo el mundo va por su propio camino: tú tienes el tuyo. Sigue tu conciencia y tu luz interior: ellas son las mejores guías en el camino que nos saca de la jungla para llevarnos a un mañana nuevo y mejor.

Podemos cerrar con esta amable pero firme nota de advertencia sobre no confundir el recipiente con el contenido, o la ayuda a lo largo del camino con el propio camino: ¡Qué conozcas la verdad, la sabiduría y la paz!

(Extracto de Live Foods [Alimentos vivos] de George y Doris Fathman)

Incluso más fantásticos son los casos de estigmas en la alemana Therese Neumann y en Giri Bala, de la India. El caso de la Sra. Neumann es, por supuesto, mundialmente famoso y se ha comprobado exhaustivamente muchas veces. Pasando por la agonía de la crucifixión cada Viernes Santo, vivió toda su vida de adulta sin nada más que una hostia sagrada una vez al día. El caso de Giri Bala es prácticamente desconocido, o lo fue hasta que Paramhansa Yogananda, en su Autobiografía de un yogui, lo sacó a relucir. Su sorprendente historia ha sido exhaustivamente comprobada. ¡Durante 55 años vivió sin comer! Durante todo este tiempo, preparaba la comida para su familia, llevaba una vida activa y, sin embargo, no tenía apetito. Ambas mujeres vivían a la luz de Dios. Cuando se les pedía explicaciones, decían que no podían revelar su secreto, en este día, que no es para la masa de la humanidad, sólo para demostrar que somos espíritus y que al final ese espíritu gobernará la carne.

    «Nunca nació el espíritu

    «El espíritu nunca dejará de ser

    «Nunca hubo tiempo

    «Fin y principio son sueños…

De Bhagavaad Gita

«Nunca hubo un tiempo en el que yo no existí, ni tú

 Ni habrá ningún futuro cuando dejemos de ser. » Sri Krishna

La doctrina de la memoria de las células

(Extracto de Overcoming Compulsive Habits [Superar los hábitos compulsivos]

El hombre se construye básicamente a partir de la comida y líquidos que entran en su organismo. Cuando comemos alimentos, se ejerce un profundo efecto sobre el consumidor, tanto en la naturaleza del pensamiento como en la de los sentimientos, según el origen de los alimentos sea de fuentes vegetales o del reino animal. Los alimentos vegetales inducen un estado de tranquilidad y una paz interior tanto en los sentimientos como en los pensamientos, con una aversión hacia la violencia tanto hacia los hombres como a cualquier otra criatura viva. Los alimentos de origen animal inducen un estado de volatilidad e inquietud en la naturaleza tanto de los sentimientos, de las pasiones como de la mente, con una inclinación hacia la rabia y violencia. La manifestación de estas características tiene su origen en las dos fuentes de alimentos. Primero, por la naturaleza intrínseca del propio alimento. Por ejemplo, si la persona come carne, los sentimientos y emociones de miedo y terror que el animal experimentó antes de que lo mataran son introducidos, junto con sus tejidos, en el consumidor. De nuevo, según dicen muchas religiones, las cualidades excitantes de pasiones que se asocian con todos los productos  animales residen en la sangre. Además, aquí tenemos una proteína que una vez estuvo viva, pero que ahora está muerta y llena de productos de descomposición, de bacterias, aditivos químicos, etc. Las tendencias que esto produce son pereza, sopor e inercia. Todo esto se suma a una serie de características inquietantes de carácter mental, sentimental y emocional que se ingieren junto con la carne que consumimos. La misma interacción se aplica al resto de los alimentos que comemos. Cualquier mineral inorgánico, sustancia química o conservantes que se añaden del reino mineral no son directamente utilizables por el organismo a menos que primero se hayan incorporado en el reino vegetal. La presencia de esta forma inorgánica actúa como irritante para el organismo, lo que se manifiesta con pensamientos y sentimientos de irritabilidad, hiperactividad, inquietud, sensibilidad y sentimientos de inseguridad.

La segunda fuente del origen de algunas tendencias mentales y emocionales se vinculan con el estado de nuestra mente cuando comemos. De una forma extraña e inexplicable, los pensamientos y sentimientos que tenemos en el momento en el que estamos comiendo entran y se combinan con los alimentos. Se transportan junto con la comida y se incorporan en la formación y fijación de las células que constantemente se están sintetizando en todas las partes del organismo. Ahí se quedan apresados para ejercer pensamientos conscientes o subconscientes, tendencias sentimentales y conductuales en el individuo.

Cuando una persona decide someterse a un proceso de desintoxicación, ya sea perdiendo peso al restringir la toma de alimentos o aumentando la calidad de los alimentos que consume se produce un proceso muy interesante. Cuando la inteligencia orgánica advierte que están llegando alimentos de más calidad que la del material con los que están hechos sus tejidos, comienza de forma inmediata a desintegrar y eliminar los tejidos de inferior calidad para dejar sitio y utilizar el material mejor en la formación de nuevos tejidos. Cuando estas células se han disuelto, los recuerdos, sentimientos y pensamientos que en un principio venían asociados con la formación de estas células se liberan en la corriente sanguínea. De esta forma, circulan por el organismo y con el tiempo llegan al cerebro. Cuando entran en el cerebro, se produce una rememoración de estos recuerdos y pensamientos y el individuo vuelve a tener conciencia de ellos. Se produce una catarsis o purificación de estos recuerdos y pensamientos y desde el subconsciente se rompe el dominio que ejercían sobre el individuo. Se experimenta una ligereza, liberación y libertad de esta esclavitud y con ello aparece la sensación de liberación que uno siente cuando se ha acabado por completo con una fase de la vida.

Se necesitan 7 años para cambiar y reemplazar por completo cada célula del organismo. Por ejemplo, cuando desintoxicamos el organismo con el ayuno, todas las células que tienen 6 o 7 años se desintegran y volvemos a experimentar los recuerdos que teníamos en esa época, pero que desde entonces se han olvidado. Conforme se eliminan los viejos fluidos en los espacios linfáticos, los recuerdos asociados se van con ellos. Si una persona no ha comido chocolate, digamos durante 20 años, pero el chocolate ha quedado retenido en los espacios linfáticos o en las células grasas, el sabor y olor del chocolate saldrá del organismo y se hará evidente tanto para el individuo como para las demás personas relacionadas con él: ambos olerán el chocolate. Las memorias asociadas con la época en la que se consumía volverán a la conciencia de la persona.

Aunque esta teoría pueda parecer rara, yo he advertido que es verdad en mi propia vida durante más de 25 años y en las vidas de otros cientos de personas que se quedaban perplejos antes las memorias subconscientes enterradas que se liberaban cuando purificaban sus organismos y corriente sanguínea.

La moraleja que esta historia nos enseña es que:

a) en los alimentos hay algo más que su química (proteínas, carbohidratos, minerales, vitaminas, etc.)

b) los sentimientos, emociones, pensamientos y el carácter de un individuo están de una forma muy sutil asociados a la calidad de los alimentos que comemos. Le hace a uno pensar sobre el carácter de la persona a la que se le permite preparar la comida de la familia.

c) Es importante considerar el factor tiempo en el cambio que un individuo debe hacer para pasar a una dieta de menos calidad a una de más. El proceso es delicado y necesita tiempo. Con el cambio de la sangre y de la química del tejido también se produce un cambio en el carácter. Aquí radica la verdadera alquimia de la «piedra filosófica», el cambio del metal base en oro, tan buscada por los alquimistas medievales. Nos compete a todos convertirnos en alquimistas modernos aprendiendo a transmutar los mejores alimentos de la naturaleza en el material con el mejor carácter posible, que nos llevará a conseguir el mayor estado de felicidad posible.

El monstruo de ojos verdes
De Virginia Vetrano

Los celos significan una intolerancia ante la «competencia» o «infidelidad», y el temor de perder la exclusiva devoción de otra persona. Implica hostilidad hacia un rival o hacia alguien que pensamos que tiene ventaja. Implica vigilar para guardar una posesión, persona o cosa para que nadie más pueda disfrutarla. Los celos y la envidia pueden provocar malas acciones. Se convierten en patológicos cuando son excesivos y cuando el poseedor y el objeto de envidia o celos se sienten heridos. No sólo los celos hieren a los demás, también hieren a la persona celosa porque daña todas las funciones orgánicas. Los celos consumen muy rápidamente la energía nerviosa y endurecen las facciones como pocas cosas pueden hacerlo. Los celos muy fuertes son una clase de locura, una combinación de sentimiento de inferioridad y egoísmo. Los celos no son simplemente el miedo a perder a la persona «amada», porque con frecuencia no hay un amor verdadero por el objeto de los celos; brota en gran parte, si no por completo, de la vanidad herida. La autoestima herida, y no el eterno amor, es lo que caracteriza principalmente la psicología del amante abandonado. Esto se puede ilustrar muy bien con el hecho bien conocido de que la agonía producida por la muerte de un amor, terrible como demuestra en shock que se puede sufrir, por regla general desaparece con más facilidad y menos tiempo, y es causa de menos suicidios que el dolor y la pena producida por la «infidelidad» del amante.

En pisos y en lujosos palacios el monstruo de ojos verdes de los celos roba toda la alegría de la vida doméstica y planta espinas de lucha. Los celos son un vicio, no una virtud. Envenena la fuente de vida. Mata el amor y el respeto y convierte las relaciones humanas en un infierno.

Existen todas las razones para que aprendamos a conservar el equilibrio emocional. Existen todas las razones para evitar, mientras vivamos, convertirnos en un monstruo de ojos verdes. Si quieres salud, esa chispa de vitalidad y belleza, deberíamos rehuir los celos como la peste. Lo destruye todo.

Debes estar dispuesto a reconocer cuando alguien puede hacer las cosas mejor que tú. Tú eres tan bueno como te permite tu tiempo y tu energía. No hay razón para tener celos o envidia de otros. Los celos y la envidia comienzan a aparecer en la niñez. A los niños se les debe enseñar a ser felices con lo que ya tienen y no insistir sobre lo que no tienen. (En realidad, también los adultos deberíamos aprender esta lección). Si te alegras con alguien cuando consigue algo nuevo y lo disfrutas con él, compartirás su alegría en vez de quedarte sentado envidiándole y sintiéndote desgraciado. Desde pequeños debemos enseñar a nuestros hijos a que no tengan envidia de las posesiones de otros. Nuestro sistema de educación enseña la competición: sólo uno puede ganar. Se debe elogiar a cada uno de los niños por su progreso, animarlo a desarrollar su don personal y no hacerlo encajar en un molde ya preparado.

Si eres una persona vaga y no puedes disciplinarte para hacer nada, entonces, admítelo y simplemente sé tú. Puede que seas más feliz simplemente haciendo pequeñas cosas, o no haciendo nada en todo el día. Eso está bien. Eso es lo que le pides a la vida. Admítelo y después disfruta los logros de los demás. Si quieres disciplinarte, lo harás. Con frecuencia los celos surgen de un miedo patológico a perder el poder que poseemos.

Si en lo más profundo de tu ser escondes un monstruo de ojos verdes, entonces, por tu propio bien, deberías convertirlo en un ángel de amor.

Liberarnos del mundo de violencia
De Arthur Andrews

«Y la razón de todo… »

Casi al comienzo de todo está la violencia que nosotros utilizamos con nosotros mismos, no la violencia que otros utilizan con nosotros o la que nosotros utilizamos con otros humanos u animales.

Si pudiésemos llevar una existencia microscópica, unirnos con nuestras células a su nivel, ver sus miedos, su pánico, las alarmas y los sistemas de defensa que establecen, sus estrategias, la comunicación, la cooperación y el apoyo que se prestan unas a otras por el bien de todas debido a lo que les imponemos cuando nos damos rienda suelta; si pudiésemos cogernos del brazo con nuestras células estomacales cuando grandes cantidades de grandes alimentos se apilan sobre nosotros, empujándonos fuera mientras luchamos por mantenernos unidos y evitar separarnos; si pudiésemos formar parte de esas escenas a ese nivel, puede que sintiéramos y nos comportáramos de forma diferente, porque estos son actos violentos que cometemos sobre nuestro yo físico. Lo que nuestro organismo necesita hacer cuando se enfrenta a una inundación de café o de alcohol debería avergonzarnos, ya que debe ser aterrador para nuestros sistemas nerviosos y confundir todas las demás partes del organismo. De verdad, piensa sobre ello y admite que convertimos nuestro cuerpo, tanto por dentro como por fuera, en un cubo de basura y un pozo negro. ¡Qué violencia!

La primera forma de violencia, no obstante, que nadie tiene en cuenta (y es el comienzo de todo) es la violencia que cometemos con los alimentos que comemos antes de introducirlos en nuestro organismo.

Obtenemos bastantes alimentos vivos que contienen fuerza vital y que esperan la oportunidad de hacer realidad su deseado objetivo y verse recompensados de esta forma al ser incorporados en nuestra forma de vida más elevada, llegando a formar parte de ella. Pero antes de que incluso tengan la oportunidad de llevar a cabo su propia evolución, nosotros los matamos y los cocinamos hasta la muerte. Las cosas que le hacemos a nuestros alimentos serían consideradas la más cruel de las torturas si se las hiciéramos a cosas que pueden llorar y, sobre todo, si se las hiciéramos a seres humanos. Pocas cosas son tan violentas como cocinar alimentos vivos. Y con muy pocas excepciones ¡es tan innecesario! ¡Qué precio tenemos que pagar por ello!

Esa violencia que perpetuamos en nuestros alimentos cuando los matamos pasa a los alimentos y de ahí al organismo donde la violencia, a su vez, se apila sobre nuestras células, tejidos, órganos y sistemas. Después, conforme se construye y compone, creciendo todo el tiempo, se incorpora en nuestro ser. Y con el tiempo, cuando nos relacionamos con otros seres humanos en el mismo estado, descargamos sobre los demás la violencia que llevamos dentro. desde irritaciones, a la rabia o la hostilidad.

Si debemos hacer frente a la violencia con seriedad y resolución, debemos hacerle frente desde su comienzo.

«Confía en los sueños, porque en ellos está oculta la puerta hacia la eternidad… »

«Vosotros, niños del espacio, inquietos en la quietud, no se seréis atrapados ni domesticados.

Vuestra casa no será un ancla, sino un mástil.

No plegareis las alas para pasar por las puertas,

Ni agachareis la cabeza para no chocar contra el techo,

No tengáis miedo a respirar porque las paredes caigan y se derrumben.

Vosotros no moraréis en paredes, y vuestra casa no guardará vuestro secreto ni albergará vuestros anhelos.

Porque eso que es ilimitado en vosotros mora en la mansión del cielo

Cuya puerta es el rocío de la mañana

Y cuyas ventanas son las canciones y los silencios de la noche.

Jalil Gibran

EJERCICIOS
Verdadero o falso

1) Los seres humanos no practican hábitos destructivos de forma consciente.

2) Cuanto menos tenemos, más libres somos.

3) La generosidad fomenta una buena salud mental.

4) Es más realista ser negativo.

5) Las personas pueden ofenderse por sermones bien intencionados o por actitudes santurronas.

Elecciones múltiples

1) Estás en una cena con personas que piensan que tus hábitos dietéticos son excéntricos, así que:

a) comes lo que come el resto

b) tiras al suelo cada plato de comida con el que no estás de acuerdo.

c) Comienzas una fuerte discusión sobre los méritos del vegetarianismo.

d) Permaneces tranquilo e intentas encontrar alguna comida que creas que puedes comer.

2) Durante la meditación:

a) Despejamos el espacio mental.

b) Nos deshacemos del exceso de bagaje mental.

c) Tenemos acceso a otros niveles de pensamiento y del ser.

d) Nos relajamos.

e) Nos renovamos y refrescamos

f) Nos centramos

g) Todas las anteriores.

3) ¿Qué de lo siguiente no es útil para fomentar un cambio en el estilo de vida?

a) las simples alegrías de la vida.

b) La fuerza de voluntad

c) Tranquilidad física

d) Trucos y juegos utilizados para dejar los hábitos nocivos.

e) Afirmaciones

f) Una conciencia culpable.

Respuestas cortas

No daremos respuesta a esta sección. Dependerá de cada estudiante en particular responder según su intuición.

1) ¿Por qué crees que las personas practican hábitos autodestructivos?

2) Si tú lo haces, ¿por qué?

3) ¿Quieres cambiar para mejor?

4) ¿Te recuerdas constantemente a ti mismo que es un milagro el simple hecho de ser parte de la vida?

5) ¿Ríes y sonríes con facilidad?

6) De las personas que conoces, ¿cuáles son las más felices/más libres, y por qué?

7) ¿Cuáles son tus prioridades en la vida?

8) ¿Qué haces para relajarte?

9) Si hoy fuese el último día de tu vida, ¿qué te gustaría estar haciendo?

10)   ¿Qué puedes cambiar sobre ti mismo hoy? ¿Cómo puedes reforzar tu fuerza de voluntad?

11)   Cuando piensas sobre ti mismo como una persona libre, ¿qué ves? ¿Cómo puedes ser más libre?

12)   Escribe algunas afirmaciones que serían significativas en tu vida. Recuerda hacerlas positivas.

13)   ¿Cuáles son tus cualidades más fuertes? (Nombra tantas como quieras)

14)   ¿Qué es lo que más te gusta hacer? (cita cuantas cosas quieras)

15)   ¿Qué puedes hacer para ayudar a otros?

16)   ¿Qué puedes hacer para ayudar a salvar el planeta? ¿Y para preservar la paz mundial?

RESPUESTAS A LOS EJERCICIOS
Verdadero o falso

1) Falso

2) Verdadero

3) Verdadero

4) Falso. Cada realidad también tiene un aspecto positivo que es igual de fuerte. Una actitud constantemente negativa es debilitadora y agota la energía mental y física. Puede generar más negatividad o hacerse realidad y perpetuarse.

5) Verdadero

Elecciones múltiples

1) d

2) g

3) c

[1] En las corrientes conductuales y cognitivas conductuales se conoce con el término de intención paradójica. (N. de la T.)

[2] Principio hindú de la no-violencia, que implica el rechazo de atentar contra la vida de cualquier ser creado, por insignificante que este sea. El máximo apóstol de este principio fue Ghandi. (N. de la T.)